¿Cómo se aborda el tema en la obra?

En la obra ‘’La cruz de El Dorado’’, el autor propone temas como la conservación, y por lo tanto previo conocimiento y futura valoración, del patrimonio natural y cultural de una sociedad. A través del descubrimiento de un mito dentro de la trama, al autor logra tocar el qué hacer cuándo se presenta una oportunidad como esta. El Dorado, una cruz hecha enteramente de oro y con incrustaciones de rubíes y múltiples piedras preciosas, es aquel hito por el cual se desarrolla la historia, y por el cual la sociedad como el personaje principal debe decidir. Así el autor pone a disposición íntegra los hechos del pasado para que el lector los pueda contrastar con su presente.

¿Cuáles son las visiones de sus protagonistas?

El autor presenta a sus protagonistas en una forma muy simple y entendible dentro de un contexto común y antiguo. Habitualmente se espera que sea una persona culta la cual respete el patrimonio que le rodea, pero Jaime Mercader, el cual es el protagonista de la obra y por lo tanto el que realiza las decisiones más importantes dentro de la trama, es un chico que ha vivido dentro de una sociedad llena de ladrones y decisiones poco correctas. Entonces, ¿Cómo se espera que él tome la decisión correcta respecto a ese hito que representa mucho culturalmente a una sociedad? El autor pone en una encrucijada al personaje esperando que tome una decisión correcta, la de una persona culta.

¿Cuál es el planteamiento del autor?

El autor a través de la trama de este libro plantea hechos muy puntales con conocer nuestro patrimonio natural y cultural para poder valorarlo. Si no llegamos ni hacemos el intento de conocer nuestro patrimonio, no se puede esperar poder respetarlo y por ende protegerlo. Debemos comprender que mediante el conocimiento de nuestro pasado, logramos superar nuestro futuro. Así como en la trama se logran resolver los conflictos que se presentan mediante la aceptación del patrimonio, podemos así resolver los que nos afectan actualmente. Problemas como el mal manejo y la poca apreciación de las comunidades indígenas o la falta de respeto que tienen la sociedad a los hitos naturales y culturales de nuestro país. Superarlos mediante la integración de los pueblos para enfrentar la imposición de la sociedad ‘’moderna, es una manera simple y a la vez tan útil que nos plantea el libro. Educar a la juventud sobre nuestro patrimonio y más que todo, saber que han logrado captar el mensaje que este patrimonio natural y cultural que nuestro país posee es tan importante para ellos y todos nosotros. El autor propone sutilmente estas soluciones en la trama y espera que los lectores puedan captarlas y aplicarlas gustosamente.

Difusión y valoración del patrimonio cultural

Para quienes hemos leído la obra es emocionante comprobar cómo los indígenas mantienen una relación de familiaridad con su medio natural. Por ejemplo, Marindia conocía qué plantas, entendía la importancia del río.

Este modelo de vida debería servirnos para reflexionar e incentivar el conocimiento de nuestro patrimonio cultural que poseen grandes maravillas y nosotros somos los encargados en dar a conocer al mundo entero de todo que posee nuestro país.

El Perú es un país multicultural, que a lo largo de su proceso histórico se ha logrado constituir en uno de los focos que alberga la riqueza cultural más nutrida y variada del mundo, que comprende todas aquellas expresiones o testimonios de la creación humana que tienen especial relevancia en relación con la arqueología, la historia, la literatura, la educación, el arte, las ciencias y la cultura en general de este país, y que además mantiene vivos los elementos específicos que distinguen sus diferentes y múltiples contextos culturales. De ahí la importancia por su protección, conservación y transmisión a las generaciones del futuro.

La valoración y difusión al mundo de nuestro patrimonio depende únicamente de cada uno de nosotros.

Por: Stefany Llempén Briones

Un cambio en nosotros

Se puede decir que en la actualidad existe ya algún tipo de conciencia en las instituciones y en el estado sobre la preservación y difusión abierta de nuestro patrimonio tanto arqueológico como natural pero no la suficiente como para que la población tome verdadera conciencia de todas las riquezas que nos rodean, haciendo así que el verdadero objetivo se pierda en el camino y se desvanezca para terminar como parte un conjunto de campañas y leyes inservibles.

El nivel de conciencia acerca del valor de nuestro patrimonio en la población es relativamente nulo, ya que la sociedad ''posee'' el conocimiento de la importancia del patrimonio en el país, pero no saben esencialmente el porqué, ya que solamente repiten lo que ven o escuchan lo que aprendieron en ciertas épocas de sus vidas. En nuestra sociedad no nace una cultura de preservación y valoración real lo que hace que lamentablemente se pueda llegar a una pérdida de identidad cultural, perdiendo así la verdadera importancia de nuestro patrimonio nacional.

Entonces, ¿Cómo notamos la diferencia entre Jaime Mercader, el protagonista de La cruz de El Dorado el cual se entera de un tesoro y planea apoderarse de él sin importar las consecuencias que esto atraería para él y para un pueblo, y la sociedad actual?

Tal vez la sociedad debería de reflexionar, promover y formar parte de estas campañas de conciencia, ir más allá de la labor de una institución y más que todo tener las ganas de conocer nuestra cultura para así, por ende, comenzar por valorar y cuidar aquel rastro de patrimonio que está a su alcance de todos nosotros. Como en la comunidad nativa que el protagonista rastrea en el libro, ésta centra toda su bagaje natural y cultural en este hito tan preciado y así como ellos, nosotros como comunidad debemos estar unidos para no declinar ante cualquier maltrato hacia nuestro patrimonio puesto que todo lo que somos hoy en día y toda la historia que la transmitiremos a nuestros hijos.

Por: Lonny Ponce Barrios

Protege lo nuestro

Si bien es cierto el planteamiento del autor en la obra incentiva la importancia de la comprensión que se le debe asumir al conocimiento del patrimonio cultural, en la obra muestra a un muchacho básicamente arrogante que sabe cómo cuidarse y abstenerse ante cualquier imprevisto, por lo tanto deja muy en claro la cultura y la inteligencia que cultivo su padre en él , cuando le explica los modales entre un gañán y un caballero, que la pasiones no igualan a todos, las diferencias están en la educación. La cultura que le brindaba no era solo filosófica, sino también de la mano a ello tomaba muy estrictamente la formación de lo cultural inculcando a que lea libros de reconocidos escritores como por ejemplo; Shakespeare y las obligó a leerlas por orden alfabético.

Ahora bien si lo cultura se muestra de manera necesaria para los jóvenes en una edad determinada, como resultado tendremos una ayuda grande para ellos mismos en un futuro. Entonces si de medidas para una prevención y protección de valoración de nuestro patrimonio natural y cultural, tendremos que hablar de que o cual es la clase de educación que se les brinda a estos de hoy en día, siendo este un tema amplio; sin embargo lo que se puede hacer al respecto no cambiaría rotundamente la visión hacia la cultura; no obstante la recomendación es necesaria, el promover charlas educativas para toda un público en general, principalmente enfocándose en los más jóvenes y los padres de familia, ya que, en la obra el padre del muchacho Jaime, es quien le desarrolla una alta conciencia por el conocimiento cultural. En cuanto al estado, debería realizar obras, construyendo nuevos museos temáticos en cada rincón del país, formando organizaciones que velen por el patrimonio, en su desarrollo y calidad, premiando o donando incentivos a los estudiantes con reconocimientos por su labor como ciudadanos al cuidar e impulsar el patrimonio natural y cultural. Un papel importante que puede desarrollar los medios de comunicación en la sociedad es realizando, publicidad al cuidado y valoración del patrimonio, esto nos servirá para nosotros, de cierta forma es la cultura que se va dejando para las nuevas generaciones y es una forma de identificarnos como ciudadanos.

Por: Alexandra Rodríguez Torres